Ahora toca llenar el día
Publicado: 20 Mar 2020, 13:17
Amigos cazadores, ahora que tenemos tiempo y tenemos que llenar el día, se me ocurre una cosa, contar cada uno de nosotros un pasaje o lance de los que hemos tenido en nuestros días de caza y que siempre quedan en nuestro recuerdo.
Yo os contare uno de los míos, yo, como muchos cazadores empece cazando zorzales, pero un verano (agosto) decidimos ir cuatro amigos a cazar la codorniz a un pueblo de Palencia una semana, en aquel tiempo se cazaba la media veda todos los días, nosotros cuatro teníamos poca experiencia o nada en la caza de la codorniz, y ademas no teníamos ni perro, el perro se lo pedimos prestado a un conocido , que ademas no era cazador, nos dejo su perra, setter ingles, la perra era coja, le había pisado la pata una vaca cuando era pequeña, estaba delgada, pero bien alimentada.
Imaginaros cuatro cazadores inexpertos detrás de una perra coja, pues grande fué nuestra sorpresa cuando la perra empezó a cazar de maravilla, aguanto toda la semana cazando, como era coja no corría a lo tonto. os diré que en aquellos tiempos había mucha codorniz.
Y esta es mi pequeña historia os la cuento porque siempre me acuerdo de ella, espero leer algunas de las vuestras que seguro que serán interesantes
Saludos cordiales Cerral
Yo os contare uno de los míos, yo, como muchos cazadores empece cazando zorzales, pero un verano (agosto) decidimos ir cuatro amigos a cazar la codorniz a un pueblo de Palencia una semana, en aquel tiempo se cazaba la media veda todos los días, nosotros cuatro teníamos poca experiencia o nada en la caza de la codorniz, y ademas no teníamos ni perro, el perro se lo pedimos prestado a un conocido , que ademas no era cazador, nos dejo su perra, setter ingles, la perra era coja, le había pisado la pata una vaca cuando era pequeña, estaba delgada, pero bien alimentada.
Imaginaros cuatro cazadores inexpertos detrás de una perra coja, pues grande fué nuestra sorpresa cuando la perra empezó a cazar de maravilla, aguanto toda la semana cazando, como era coja no corría a lo tonto. os diré que en aquellos tiempos había mucha codorniz.
Y esta es mi pequeña historia os la cuento porque siempre me acuerdo de ella, espero leer algunas de las vuestras que seguro que serán interesantes
Saludos cordiales Cerral